Jonathan Buezas (33) fue notificado de la acusación formal por el homicidio de Mauricio Grasso (40). Por consejo de su abogado, Mauricio Varela, el sospechoso optó rechazar ser indagado por la fiscal del caso, María Florencia Salas, y permanecerá detenido en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
El hombre detenido por el crimen del turista Mauricio Grasso (40), ocurrió el último lunes a la madrugada en el centro de la ciudad, se negó a declarar ante la Justicia y permanecerá alojado en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
Jonathan Buezas (33) fue trasladado a Tribunales a primera hora de este jueves y, tras entrevistarse con su abogado Mauricio Varela, optó rechazar ser indagado por la fiscal María Florencia Salas, quien le notificó la imputación formal por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”.
Buezas había sido detenido este miércoles a la tarde, cuando arribó a la heladería donde trabaja, en Colón al 2200. En tanto, este jueves a la madrugada personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local allanó su domicilio y secuestró allí cuatro balas calibre 9 milímetros, un cargador y una motocicleta que sería la misma que se puede ver en las imágenes tomadas por las cámaras de seguridad que captaron la secuencia de la fuga del homicida.
Vale recordar que el crimen se registró el lunes a la madrugada, a la salida del boliche Momentos. El domingo a la noche, Grasso se había juntado a cenar con su amiga y sus dos amigos marplatenses, que si bien uno es dueño de un restaurante, habían decidido reunirse en la casa de uno de ellos.
Tras la cena, los cuatro amigos fueron a bailar al local ubicado en Bolívar y Santa Fe, de donde salieron cerca de las 4 de la madrugada del lunes. Subieron a la Toyota Hilux: los dos marplatenses iban adelante y Grasso y su amiga de Moreno atrás.
Al llegar a Bolívar e Independencia, los cuatro amigos se cruzaron con dos motos, en las que iban una pareja en cada una, que realizaban “cortes”, es decir contraexplosiones. Desde la camioneta quisieron elogiar estas maniobras y el marplatense que iba como acompañante gritó: “¡Bien ahí, rey!”.
Sin embargo, al parecer ese intento de elogio fue tomado como ofensa por los motociclistas, quienes persiguieron a la camioneta por Bolívar y, cuando la Toyota Hilux dobló por 20 de Septiembre le dispararon desde atrás, una única bala que atravesó la luneta e impactó en la cabeza de Grasso, quien murió prácticamente en el acto.
Los motociclistas huyeron por Bolívar en dirección hacia Jara, mientras que las víctimas se quedaron en el lugar y pidieron ayuda. Personal de la comisaría primera y del SAME fueron hasta el lugar. Los médicos constataron el fallecimiento de Grasso y asistieron al resto de los ocupantes de la camioneta, quienes estaban ilesos.